El presidente de 77 años se reunirá con el Papa Francisco en el Vaticano el miércoles (20). En París, Lula también participará en la cumbre sobre un nuevo pacto financiero global para hacer frente al cambio climático.
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“Voy a almorzar con Macron. Quiero discutir con él la cuestión del Parlamento francés, que aprobó el endurecimiento del acuerdo Mercosur-UE”, dijo Lula en una entrevista transmitida en vivo por la cadena pública TV Brasil.
“La UE no puede intentar amenazar con castigar al Mercosur si no cumple con esto o aquello. Si somos socios estratégicos, no hay que amenazar, hay que ayudar”, añadió el presidente, reiterando una declaración que hizo la semana pasada al recibir a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en Brasilia.
Mercosur, formado por Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay, llegó a un acuerdo con la UE en 2019, después de más de 20 años de negociaciones. Sin embargo, el pacto no fue ratificado, en parte debido a la preocupación de Europa por las políticas ambientales del expresidente de derecha Jair Bolsonaro (2019-2022).
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El clima mejoró con el regreso de Lula al poder en enero, pero las exigencias medioambientales de los europeos, contenidas en un documento complementario al acuerdo presentado recientemente por la UE, moderaron el entusiasmo.
El almuerzo organizado por el presidente Macron está previsto para el viernes, último día de la agenda de Lula en Europa.
Lula participará, el jueves y viernes, en París, en la cumbre mundial que busca reformar la arquitectura de las finanzas globales para responder mejor a los desafíos del cambio climático.
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El presidente también dará un discurso el jueves sobre medio ambiente en el espectáculo “Power Our Planet: Live in Paris”, frente a la Torre Eiffel, en París. Organizado por la ONG Global en paralelo a la cumbre, el espectáculo contará con las actuaciones de estrellas como Billie Eilish, Lenny Kravitz y H.E.R.
El martes (20), Lula se reunirá en Roma con el sociólogo Domenico de Masi; y, el miércoles, será recibido por el presidente de Italia, Sergio Mattarella, el alcalde de Roma, Roberto Gualtieri, y el papa Francisco, en el Vaticano.
Con el Papa, Lula pretende “hablar sobre la cuestión de la paz (en Ucrania), y también sobre la cuestión de la desigualdad” en el mundo.
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En sus casi seis meses en el cargo, Lula mantuvo 33 reuniones con líderes extranjeros, una más de las que Bolsonaro tuvo en sus cuatro años de gobierno.