El país tolerará a los visitantes homosexuales, pero "tienen que aceptar nuestras reglas", dijo Salman en una entrevista con el canal ZDF. En la entrevista, que fue abruptamente interrumpida tras los comentarios, Salman añadió que la homosexualidad es “haram”, un pecado prohibido en el Islam.
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El país ha sido criticado por su política discriminatoria, que ha sido ampliamente denunciada por organizaciones de derechos humanos. Y las reacciones llegan de todos lados, desde la afición hasta los jugadores.
Los capitanes de selecciones europeas como Inglaterra, Francia o Alemania lucirán brazaletes con los colores del arcoíris con el mensaje “One Love” en una campaña contra la discriminación. Los aficionados en los estadios alemanes pidieron el sábado boicotear el Mundial.
Qatar recibió críticas antes de la Copa del Mundo por su historial de abusos contra los derechos humanos, incluido su trato a los trabajadores migrantes y su postura sobre los derechos de las mujeres y LGBTQIA+. La homosexualidad es ilegal en el emirato.
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La ministra del Interior alemana, Nancy Faeser, dijo la semana pasada durante una visita a Qatar que verá la Copa del Mundo después de recibir “garantías de seguridad” del primer ministro del emirato para los aficionados LGBTQIA+.
(Con AFP)
