El historiador dijo que Isabel II estaba consciente de las peleas dentro de la familia, de la salida de Harry y su esposa, Meghan Markle, de sus deberes reales, y quería ver a todos vivir en armonía nuevamente. “Ella sabía que los conflictos eran parte de la vida y no guardaba rencores. Por encima de todo, quería ver feliz a su familia”, dijo Hardman a la publicación.
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Los hijos de la princesa Diana, William y Harry, han tenido una relación turbulenta durante años. La relación entre los hermanos empeoró tras una entrevista entre Harry y Meghan con la presentadora estadounidense Oprah Winfrey. En ese momento, dijeron que miembros de la familia real habían comentado sobre el color de piel de los hijos de la pareja y habían expuesto conflictos internos, incluso con la princesa Kate Middleton, la esposa de William.
Poco después de la muerte de la reina, en su primer discurso como rey, Carlos III rindió un breve homenaje a sus hijos, nombrando a Guillermo Príncipe de Gales, y expresando su amor por Harry y Meghan, además de desearles a ambos suerte en sus vidas en el extranjero. .
(Con Contenido de Estadão)
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