Cuando la ley que crea el nuevo mínimo para la enfermería fue bloqueada, el ponente del caso en el Tribunal Supremo, el ministro Roberto Barroso, sólo quiso entender y garantizar de dónde vendrán los recursos para hacer frente a estos aumentos. No se trata de ir en contra de los aumentos salariales de la categoría, sino de responsabilidad financiera. Es decir, ¿quién va a pagar esta factura?
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En la sesión de este jueves (15), toda la sala de la Corte Suprema fue convocada para decidir sobre el tema. Los Ministros votaron en contra o a favor del informe de Barroso.
Ricardo Lewandowski, Alexandre de Moraes, Dias Toffoli, Carmen Lúcia y Gilmar Mendes acompañaron al relator y votaron a favor de suspender la remuneración mínima de R$ 4.750 mensuales.
Barroso dio dos meses para que el Congreso y el Ejecutivo expliquen los cambios financieros y la forma de costear los gastos de la medida.
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Comprenda por qué el piso de enfermería terminó en la Corte Suprema
El salario mínimo de R$ 4.750 para enfermeros fue creado a partir de una ley aprobada por el Congreso Nacional, determinando que los técnicos de enfermería reciban el 70% del valor y los auxiliares de enfermería y parteras el 50%.
Tras la sanción del presidente Jair Bolsonaro -que hace campaña por la reelección- estados, municipios y hospitales privados comenzaron a argumentar que los montos podrían provocar un agujero en las cuentas públicas. La Confederación Nacional de Salud, Hospitales y Establecimientos y Servicios acudió al STF, que entendió que los alegatos eran válidos.
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