El Ministerio de Defensa ruso detalló que el bombardeo “con cuatro misiles” tuvo lugar en la localidad de Makiivka, ocupada por Rusia en la provincia oriental de Donetsk, y que impactó en “un centro de despliegue temporal” del Ejército. El ministerio no detalló la fecha exacta en la que se produjo el bombardeo, pero dijo que se trató de un ataque con lanzacohetes HIMARS, un tipo de arma entregada por Estados Unidos a la Ucrania.
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El Ejército ucraniano reconoció haber realizado bombardeos contra hasta diez vehículos y un número no especificado de soldados en Makiivka y asevera que el ataque tuvo lugar el 31 de diciembre. El anuncio de estas pérdidas provocó críticas al mando militar ruso, acusado por el ex líder separatista Igor Strelkov de almacenar municiones en el edificio desprotegido.
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, afirmó que las fuerzas de su país han derribado más de 80 drones desde principios de 2023. “En un futuro próximo, este número puede aumentar”. La oficina de Zelensky anunció que el 3 de febrero está prevista una reunión cumbre entre Ucrania y la Unión Europea en Kiev, en la que se discutirá la ayuda financiera y militar.
(Con AFP)
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