El proyecto de acuerdo, propuesto por China, que preside la COP15 en biodiversidad, fue rápidamente celebrado por las organizaciones ambientalistas, aunque aún debe ser aprobado por los 196 firmantes del Convenio sobre la Diversidad Biológica antes de que finalice la cumbre el lunes (19).
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"China ahora tendrá que defender las ambiciones incluidas en este documento, reuniendo a todas las partes indecisas en el abrumador consenso global de que la pérdida de biodiversidad es una crisis urgente que necesita acción inmediata", dijo Alfred DeGemmis de la Wildlife Conservation Society.
Sin embargo, DeGemmis también advirtió que gran parte del texto se centra demasiado en acciones para 2050 en lugar de logros más inmediatos para 2030.
La cuestión de cuánto dinero darán los países ricos al mundo en desarrollo, donde se encuentra la mayoría de los biodiversidad en el planeta, ha sido el punto más controvertido.
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Las naciones de bajos ingresos señalan que los países desarrollados se han enriquecido explotando sus recursos y, por lo tanto, se les debe pagar para proteger sus propios ecosistemas.
La ayuda actual al mundo en desarrollo asciende a unos 10 millones de dólares al año. Sin embargo, la ambición expresada por los países del Sur era de 100 mil millones de dólares.
Los delegados están trabajando en un acuerdo histórico para reducir la destrucción y la contaminación que amenaza con la extinción de alrededor de un millón de especies de plantas y animales, según los científicos.
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(con AFP)
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